"(...) Cuando nos llevaron a Los Giles, aquella madrugada de agosto del 36, nos molieron a palos entre el "Verdugo de Tenoya" y tres de los encargados de los tomateros de los Betancores, unos bestias sin piedad que nos pegaban con las pingas de buey y las varas de acebuche por todo el cuerpo rajándonos la ropa y la piel a cachos, esa noche murió Juaneque, el chiquillo de 16 años hijo de Antonio Tejera de Jacomar, al pobre le cortaron el cuello con el látigo de Don Ezequiel Betancor y la sangre le salía como el chorro rojo de una fuente de agua caliente. Los falangistas bebían mucho ron de caña, estaban todos borrachos y se reían y burlaban mientras nosotros gritábamos de dolor, a Valencia le cortaron la barriga y se le salieron las tripas, mientras Manolo Acosta el jefe falangista le pateaba la cabeza.
Tu debes saber que las derechas siempre acaban uniéndose para pisar los derechos de los trabajadores y robar todo el dinero que puedan, por eso nos hicieron tanto daño, esas palizas se repitieron diariamente durante dos meses hasta que nos llevaron al campo de concentración de La Isleta, no nos perdonaron que ganáramos las elecciones con el Frente Popular, donde toda la izquierda formamos una unidad que jamás se ha visto en la historia de España.
La única salida para los trabajadores es estar unidos, dejar a un lado las diferencias, unirnos contra el fascismo que nunca muere del todo, siempre vuelve a nacer cuando el capitalismo necesita matar para seguir manteniendo los privilegios de los ricos..."
Extracto de la entrevista a mi abuelo materno Juan Tejera Pérez el 19 de noviembre de 1979.
Juan Tejera en la entrada de su casa de Tamaraceite (Gran Canaria), con 84 años mostrando una foto de cuando tenía 19 años y jugaba de extremo izquierdo en el "Luz y Vida". |
No hay comentarios:
Publicar un comentario